Este artículo va a ser muy corto pues sólo vamos a explicar la diferencia entre uno y otro. Pero lo importante es conocer las diferencias.
SAUTÉ.

Del término francés «sauter», que significa saltar. Su uso está indicado principalmente para el salteado de productos rápidamente sin quemarlos ni cocerlos al vapor. El objetivo es que el calor se reparta de forma homogénea a los alimentos y gracias a sus paredes medianamente altas se consigue que no se escapen los alimentos de su interior al saltearlos, ni que se produzcan salpicaduras. Además, permite la incorporación de líquidos, caldos, vino o salsas. Lo habitual en ellas es cocinar los alimentos rápidamente a fuego alto en muy poca cantidad de grasa o aceite. Se intenta aprovechar en ellas toda la superficie de para que los alimentos adquieran rápidamente el calor que desprende.
Las Sautés, son básicamente una sartén con paredes de lados verticales que evitan que los ingredientes puedan moverse en su interiror sin que se derramen cuando realizamos los típicos movimientos de salteado que atodos nos encantan (golpecito de muñeca para el que hay que tener cierta técnica). En su mayor parte suelen comprarse con tapa precisamente para esa distribución homogenea del calor que se pretende y es frecuente que posean un mango algo más largo que una sartén y/o asa.
Os dejamos nuestra mejor recomendación de Sautés y recordad que se trata de un menaje muy «kuki» que requiere cierta habidad para sacarle todo el provecho y que suele tener precio algo más elevados que una sartén normal. Aquí te muestro tres buenos ejemplos con muy buenas opiniones de compradores. y diferentes precios.
SARTÉN.

De estas tenemos todos los humanos en casa. La usamos para todo y existen igualmente en todos los tamaños y materiales. Su uso está indicado para cocinar cualquier tipo de alimento, superficie también plana y lados no muy altos e inclinados hacia afuera. No suelen llevar tapa y la diferencia primordial es que puede usarse para cocinados más lentos que en la sauté.
En la sartén suele usarse mayor cantidad de aceite o grasa y se pretende con ello el cocinar y freir, más que el salteado (indicado para las sautés). Aunque ya sabemos que no es eso lo que hacemos en casa. No deberíamos tampoco usarlas para cocinar a la plancha, porque para ello ya existe un menaje específico donde podrás hacer tus mejores manjares a la plancha sin casi aceite y manteniendo todas las propiedades de tus carnes, pescados y verduras, todo ello te lo explicamos perfectamente aquí.
En nuestro artículo «La Antiadherencia…. la duda del teflón» os damos un breve repaso de las diferentes opciones de sartenes en sus diferentes materiales, ventajas y desventajas, no dejes de leerlo si vas a comprar una sartén…. más que nada por el bien de tu placa y el de tus ricas recetas. Ahí encontrarás rápidamente (usando la tabla de contenidos que tienes al inicio) nuestras mejores recomendaciones de sartenes en función del material de fabricación.
Y si quieres ir directamente a por la sartén de Hierro cuyas propiedades antiadherentes mejoran con el tiempo, sólo tienes que pasar por nuestro artículo de Sartenes de Hierro.